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«Ayer Pau de Nut me hizo comprender los términos "versión" e
"intérprete". No soy capaz de expresar con palabras la ternura y casi
las ganas de llorar que provocó en mi su interpretación de "La Ramona",
sí, "La Ramona". Pasó por todos los palos, escuché una nana, un temazo
de lo más caliente y una canción alegre para acabar en un drama
desgarrador de los que te hacen pensar. Bravo una vez más Pau, es un
placer escucharte, eres delicioso.
»Besos y orejas agradecidas.»
Lucía Contreras, rendida a cuerdas, ¡a todas! (espectadora), 20 enero 2013
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«Fascinada amb Pau de Nut per fer del cello i de la veu dues armes de destrucció massiva. De destrucció de tòpics i barreres musicals. . El que té a la mà esquerra no són dits, són martells!»
Alba Forés (espectadora), 21 junio 2012
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«Hay que echarle cojones pa salir uno a escena armado tan solo con un bigotillo y un violonchelo. Hacer que un chou de èsta guisa no solo no aburra sino que ademàs te mueva las entrañas, te haga reir a carcajadas y llorar de emociòn como un imbècil no tiene precio, por no hablar de temas estrictamente musicales, cosa que daria para una tesis completa. Usted tiene el arte y a la musa de su parte. De Nut, dios os guarde.»
Caballero Reynaldo (egregio espectador), 21 julio 2011
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| (clic en imagen para ampliar y aquí para traduccion al castellano) Àlex Gorina, Revista EL TEMPS nº1284, 2009 |
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David (espectador), 5 marzo 2007
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«Un juego de palabras designa uno de los espectáculos más divertidos y originales que haya visto en los últimos años. Es el concierto cómico de Pau De Nut, un simpático “canta-historias” del underground barcelonés, armado con un violonchelo, que con pocos hilos (la voz, el instrumento y el humor) teje un one-man-show digno de nota. Su espectáculo es como la cerveza, que se desliza por la garganta ligera y fresca. Es un deleite para las orejas y para el corazón: en el espectador risas espontáneas se alternan en una sentida admiración por su voz, capaz de afrontar cualquier registro vocal, y por el sonido de su violonchelo, capaz de recorrer cada tipo de melodía e hipnotizarte.
»Pau empieza a contar, implicando a los espectadores desde el primerísimo instante y haciéndoles sentir parte del mismo escenario y, después, afina notas y voz y hace volar a los presentes de una melodía a otra, de una época a otra, en su modo genuino, ingenioso, cálido e irreverente.
»Se mueve libremente desde Georg Friedrich Händel a Jacques Brel, de Juan del Encina a Björk, de Henry Purcell a los Velvet Underground. Pau canta en todas las lenguas (español, inglés, francés, italiano, japonés…) y en todas las notas, dentro y fuera del pentagrama, y sus canciones suenan afinadas o roncas según el fragmento. Inserta temas sociales y políticos provocadores. Su vocecita clara pero potente y su impecable instrumento hacen sonreír, reír, y viajar; viajar a través de tiempo, la sátira y la música.
»Todo esto acontece en el ambiente de un pequeño e histórico espacio escénico: el Café-Teatre LLantiol. Se encuentra en la estrecha y angosta Calle Riereta, en medio del barrio del Raval, y es uno de los muchos Café-Teatro del viejo Cabaret de los cuales, en la ciudad, todavía pululan. Un antro antiguo y mágico que te transporta, realmente, a una época en la cual los artistas e intelectuales cabalgaban el escenario para ofrecer a unos pocos íntimos un espectáculo hecho de monólogos, canciones, sketch, que, por el mismo contenido anticonformista, rechazaban el gran público. Justamente aquel momento de finales del siglo XIX, que vio nacer el Café Noir en Francia y el Überbrettl en Alemania y, en general, ese tipo de teatro cabaretero entre taberna y círculo privado que demandaba inteligencia, agudeza, despreocupación, mordiente, y con capacidad de improvisación.
»En fin, Pau De Nut es un modernísimo artista y humorista que vuelve a visitar modalidades teatrales cuyas raíces se hunden en un pasado lejano. Un juglar de nuestros días. Probablemente se merecería mucho más éxito del que realmente obtiene con estas pequeñas exhibiciones (cada entrada sólo cuesta 5 euros). Pero, por lo menos, permanece uno de aquellos verdaderos artistas que todavía exploran las posibilidades del escenario y de la palabra, que todavía no ceden a las tantas avenencias comerciales, que todavía consiguen establecer un verdadero contacto con la propia audiencia. He salido del Café-Teatro Llantiol y, poco después, paseando, me lo he encontrado en la Rambla del Raval, con su violonchelo a cuestas y rodeado de los amigos de siempre, los mismos que durante el espectáculo reían y respondían a sus bromas. Nos hemos cruzado y mirado, y nos ha saludado a mí y a mis amigos. Y, sorpresa, me he dado cuenta de que, en espectáculos como éste (qué bonito) ninguno es un mero espectador, sino un amigo, un colega, un vehículo, y una parte integrante del show. Escenario y platea unidos en un íntimo círculo.»
Elena, IL PENTAURO, blog cultural y literario, enero 2008
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Silencio (espectador o espectadora) 16 febrero 2008
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PAU DE NUT: VERDE QUE TE QUIERO VERDE
Sábado 15 noviembre. Plan de la noche: acabar un día rico en actividades culturales rodeado de buenos amigos, con un enigma de nombre extraño: PAU DE NUT.
A priori, la propuesta pintaba muy bien. Música e interpretación hechas poesía sobre el escenario para hacer un viaje emocional, honesto y sincero al universo de este músico y actor de 31 años que, en la fracción de espacio de El Llantiol (c/Riereta) y de los justos 60 minutos de tiempo que dura el espectáculo, CONCIERTOENCANTO, recrea una quincena de canciones abrazando a su chelo, a la vez que crea vínculos de atracción sirenística entre el público con una voz dúctil i trabajada desde la experiencia autodidacta, a quien sin duda acaba seduciendo irresistiblemente con el encanto personal de una ingenuidad con espolones de cinismo y una transparencia humana que lo hace realmente único.
No es un triunfito. Aforunadamente, hay vida más alla del planeta O.T. No tiene escuela. No vive en este mundo. No siente lo mismo que sentimos todos. Como confiesa en diversos momentos del espectáculo: "Soy rarito". Es más, como canta —a la manera de un himno— con el memorable No es fácil ser verde que la rana Gustavo interpretó hace años en un genial capítulo de Los Teleñecos, se declara culpable del síndrome de la diferencia. En resumen, un extraterrestre con todas las de la ley, que cada sábado de noviembre salta de su platillo volante para abducir desde el escenario del Llantiol a todos los curiosos aficionados que asistan a este encuentro ufológico-musical.
Un repertorio alucinantemente ecléctico de más de 100 canciones que va de Tim Buckley a Juan del Encina, pasando por Scarlatti, Stravinsky, Quiroga, Rodger & Hammerstein, Jacques Brel, The Velvet Underground, Tom Waits, Los Chunguitos, Rocío Jurado, Astrud, U2, o Björk, y que se manifiestan como si fueran espíritus de amores vividos, enterrados o resucitados, o como fantasmas de la cruda realidad de nuestro mundo a través del mediumístic talento de Pau de Nut.
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«Pasamos una hora de poesia, de canciones de varias epocas. Es todo un personage, que nos hace descubrir su mundo, una vision del alma humana, de nuestros corazones. Es un artista joven, pero parece que conoce bien a los seres humanos. Es un hombre lleno de sensibilidad, de suavidad, de critica social... Una hora para sonreir, reir y cantar...»
«No se puede decir "cebolleta en vinagreta" de forma más bonita. No se puede interpretar un icono postmoderno como "abracadabra" con mayor sensibilidad. Si la Jurado la Piaf levantasen la cabeza no tengo duda: harían un dúo este señor. Nadie se pasa por el arco ni lo que se pasa Pau de Nut, ni cómo se lo pasa, sea el tema que sea.»
«Fuimos porque quería dar una sorpresa mi mujer por su cumpleaños. Miré los espectáculos del día y no dudé en escoger éste. Ya habíamos visto a Pau en otro espectáculo en el Llantiol. Fue hace mucho tiempo en un espectáculo de variedades en el que participaban varios artistas. Él fue el que más nos gustó con diferencia. Esta vez ha sido todavía mejor: más canciones, más emotivo, más cercano... en pocos espectáculos acabas hablando con el artista. Super recomendable!»
«Las expectativas son malas compañeras de viaje. Yo desde que ví en el cine Delicatessen (y no me gustó tanto como esperaba) he decidido dejarlas guardadas bajo llave. Por eso, ante cualquier acto cultural (y aquí englobo un concierto, la lectura de un libro, el estreno de una serie y mil posibilidades más) intento acercarme lo más limpio posible. Está claro que el bagaje personal de cada uno lo impide en ocasiones. Pero mientras se pueda, yo lo recomiendo.
»Así fui hace dos fines de semanas a ver a Pau de Nut invitado por E. Sólo sabía que armado de un violonchelo acometía versiones de lo más variopintas. No quise más información. Ahora y aquí puedo decir que ha sido una de las mejores experiencias de mi vida.
»La particular disposición del Espacio Inestable de Valencia también ayudó. Rodeándole en pequeñas gradas, Pau salió en penumbra recitando unos versos casi punks. Después se hizo la luz en todos los sentidos. Con su instrumento, su maravillosa voz y la amplia cultura con la que amenizaba los silencios entre temas, nos condujo, durante dos horas, por toda la escala de sentimientos que un ser humano es capaz de recorrer. Versiones de Joy Division, Nina Simone, Conchita Bautista, Lou Reed, Rufus Wainwright, Erik Satie, Jacques Brel, Björk, Jimmy van Hausen, Vainica Doble, Olga Guillot, Paquita la del Barrio, Guillermina Motta,... como nunca antes las había escuchado. Hacía tiempo que no me ponía en pie para aplaudir al finalizar un espectáculo. Aquí lo hice.
»Me cuesta entender que una propuesta como la de Pau de Nut no tiene más repercusión. Cómo festivales que presumen de modernos y eclécticos no le programan. Cómo la televisión o internet o cualquier plataforma de comunicación no difunde su arte con más intensidad.
»Sólo me queda recomendaros que vayáis a verle cuando tengáis ocasión. Es tanta la fe que tengo en él, que si no os gusta, me comprometo a devolveros el precio de la entrada.
En su myspace tenéis el listado de las canciones que interpreta y algunas actuaciones en vídeo. Puede resultar extraño, pero os recomiendo que no las veais. No hacen justicia al espectáculo que supone verlo en directo.»
«Siempre he creído que conocer a un fénix sería triste y efímero, pero me equivoqué al disfrutar de nuevo de Pau de Nut. En cada concierto encanto que he visto, ha resurgido con un colorido de sentimientos diferente al anterior, mostrandolos todos en el escenario hasta consumirse de nuevo. tenemos ganas de volver, para saber que nuevo colorido emocinal nos mostrará en su próximo resurgir en el escenario. »
Katie (espectadora), 23 febrero 2009
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Lucía (espectadora), 5 junio 2009
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Entrevista en «El Secret» de Catalunya Ràdio 25 de marzo 2010
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Juan José (espectador), 2 julio 2010
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»Así fui hace dos fines de semanas a ver a Pau de Nut invitado por E. Sólo sabía que armado de un violonchelo acometía versiones de lo más variopintas. No quise más información. Ahora y aquí puedo decir que ha sido una de las mejores experiencias de mi vida.
»La particular disposición del Espacio Inestable de Valencia también ayudó. Rodeándole en pequeñas gradas, Pau salió en penumbra recitando unos versos casi punks. Después se hizo la luz en todos los sentidos. Con su instrumento, su maravillosa voz y la amplia cultura con la que amenizaba los silencios entre temas, nos condujo, durante dos horas, por toda la escala de sentimientos que un ser humano es capaz de recorrer. Versiones de Joy Division, Nina Simone, Conchita Bautista, Lou Reed, Rufus Wainwright, Erik Satie, Jacques Brel, Björk, Jimmy van Hausen, Vainica Doble, Olga Guillot, Paquita la del Barrio, Guillermina Motta,... como nunca antes las había escuchado. Hacía tiempo que no me ponía en pie para aplaudir al finalizar un espectáculo. Aquí lo hice.
»Me cuesta entender que una propuesta como la de Pau de Nut no tiene más repercusión. Cómo festivales que presumen de modernos y eclécticos no le programan. Cómo la televisión o internet o cualquier plataforma de comunicación no difunde su arte con más intensidad.
»Sólo me queda recomendaros que vayáis a verle cuando tengáis ocasión. Es tanta la fe que tengo en él, que si no os gusta, me comprometo a devolveros el precio de la entrada.
En su myspace tenéis el listado de las canciones que interpreta y algunas actuaciones en vídeo. Puede resultar extraño, pero os recomiendo que no las veais. No hacen justicia al espectáculo que supone verlo en directo.»
Rafa Rodríguez, EL ARTE DE COCINAR PARA DOS
(blog cultural) 7 junio 2010
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«Siempre he creído que conocer a un fénix sería triste y efímero, pero me equivoqué al disfrutar de nuevo de Pau de Nut. En cada concierto encanto que he visto, ha resurgido con un colorido de sentimientos diferente al anterior, mostrandolos todos en el escenario hasta consumirse de nuevo. tenemos ganas de volver, para saber que nuevo colorido emocinal nos mostrará en su próximo resurgir en el escenario. »
Benjamín (espectador), 19 junio 2010
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astronomía pau y música nut
«Astronómicamente un eclipse lunar sucede cuando la tierra se interpone entre el sol y la luna, cuando esa luna que todos vemos entra en la zona de sombra de la tierra. cuando entra en su cono. cono del mundo. y todo esto aconteció mágicamente en la noche del miércoles. fuimos a calvario bar, un rincón mágico para una noche mágica. fecha perfecta que permanecerá en todos los anales. 15 de junio. tres cuerpos se cruzan, la tierra la luna y el sol. eclipse lunar. Asisto a otro eclipse, un concierto que me obnubila. y donde otros tres cuerpos se atravesaban los unos a los otros. pau de nut, su cello y su público. tres cuerpos geográficamente en movimiento. memorable día.
»nos arrojaba a la cara su chorro de voz, y el ángulo que formaba con su otro cuerpo, su cello, hacía de él una especie de baricentro, como si fuera ese punto que corta en dos la figura geométrica que éramos nosotros. nosotros eclipsados allá, más abajo, en la tierra. aquella noche pau transitó mi oído y eclipsó mi cuerpo exterior y mi gran cuerpo interior. lo que más me gusta de pau es que cruza sin esfuerzo el puente de su voz tenue y dulcísima -casi contratenor-mujer, casi casi sopranista) a la voz más desbarrada pero desgarradoramente controlada... la luna aquella noche se volvió completamente roja. y mi corazón también. sé que esto no volverá a ocurrir hasta 2018. el hallazgo del eclipse. el hallazgo de pau. el del eclipse... el de pau. esperaré esperaré esperaré.
»aquel día llevamos tiramisú. aquellos que vieron la casa de la fuerza comprenden en toda su extensión lo que puede significar tiramisú para pau de nut. así que eso hicimos, llevar un tiramisú temerosa del des-hecho por calor. se lo dimos antes del comienzo y pidió que lo guardaran en una de las cámaras. tras casi dos horas de emoción contenida a veces otras desaforada (con pau le entran a una gana de gritar y de cantar), y tras terminar con un espeluznante y sarcástico i love you baby de gloria gwaynor, donde su voz subía al cielo y bajaba a los infiernos, volvió al ruedo para ofrecernos un último momento. mi momento. un cum dederit -que de haber esperado escucharlo, hubiera sido eso, escuchado- donde pau le proponía matrimonio a mi mano para salir al escenario y alimentarle mientras cantaba aquella maravillosa siciliana tumbado en el suelo del calvario y con el cello apoyado sobre su pecho, como si estuviera amamantándole y viceversa, mientras, yo le daba cucharadas de tiramisú...»así que escuchar su voz vivaldicalta a centímetros de mí mientras me pedía alimento en la nota más alta... saber que alargando mi largo brazo podría tocar a la criatura que mecía en su pecho. su cello. fue una gozada tocar su voz más sopranista. ver su campanilla en el frutus ventris. su sonrisa abierta. un bello recuerdo. un momento "angelical" -liddellmente hablando. un pequeño tesoro-homenaje a guardar en el planeta rojo de mi corazón.
»así que determino que sí, que la física existe, la astronomía, la matemática (guiño-malia), la astrofísica existe, pero señores, aquella noche, la magia, la alquimia, fue la reina de todas las ciencias. noche mágica por pau. por su voz. por el eclipse. por los amigos inesperados que una vuelve a ver., por los ausentes. por pau otra vez. por su mujer en-cello. por su garganta. por la dolores. por la homérica y trágica ramona. por la dura decisión de la suzanne de brel y la cobardía de este. por la contención de la otra suzanne de cohen. Por shangai y sus piernas largas. por todas las putas y todos sus nombres. por lola-carne más real que todas, si cabe. por la casa de la fuerza y su angélica mano. por el tiramisú del amor. por las manos que formaron lo que conforma esa palabra. por la garganta de pau tumbada finalmente a mi lado. por mi mano-sorpresa alimentando su voz-cello tiramisutilmente. por el cello en el pecho y su pica clavada al suelo. por su cum dederit. por vivaldi. ay vivaldi. por su regalo sobre todo. por la magia, otro hallazgo de noche, como aquel eclipse que descubrimos al salir. por bolo, el caballo que me salvó.
»*tú querías tocar al aire libre, en una azotea y con el cielo de madrid cayendo sobre la tierra. el cielo de techumbre con su peso. y entre tus manos el peso de la tierra y su cello... el peso de tu voz. me alegra pensar que decidí el día correcto y de manera tan inconsciente. un 15 de junio, noche de luna llena tocaste en el mar rodeado de olas y sirenas. no hubo ni un ápice de sombra en la piel de tu voz.»
*fotos de ágatha faveris y s. montaner
Nuria Ruiz de Viñaspre, EL RASCACIELOS (blog literario) junio 2011
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«No hi ha 2 Conciertos Encanto iguals. Cada cop Pau de Nut ens explica els seus sentiments i ens els il·lustra amb cançons. En l'espectacle d'ahir vam fins i tot poder descobrir de la poesia i el patiment que hi ha en cançons que ens passen desaparcebudes, com ara "La Dolores". Des de madrigals renaixentistes fins a cançons de pel·lícules, Björk... Cançons generalment en castellà tot i que també en va cantar alguna en català, japonès, francès, anglès, esperanto... Una estona divertida i amena, una estona trista, una estona on els sentiments surten a flor de pell, gràcies al grandiós talent de Pau de Nut al cant i al violoncel, però sobretot gràcies a la seva sensibilitat. He rigut, he plorat i durant tot l'espectacle he tingut la carn de gallina. El millor que he vist mai.»
Ferriol (espectador), 30 julio 2010
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| (clic en imagen para ampliar) Emili Piera, diario LEVANTE, 17 septiembre 2010
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